15 Feb Reseña: Los caballeros

Antes de cumplir 30 años, Guy Ritchie dirigió una ingeniosa comedia gansteril llamada Juegos, trampas y dos armas humeantes (1998) que inmediatamente lo puso en el radar; tanto así, que para su siguiente producción de corte similar, Cerdos y diamantes (2000), un Brad Pitt de moda quiso subirse al tren.

Corte a veinte años después. En el camino Ritchie se engolosinó con Hollywood y dirigió, entre otras cosas, dos películas de Sherlock Holmes (2010 y 2011), el fiasco de El Rey Arturo: La Leyenda de la Espada (2017) y la iteración más reciente de Aladdin (2019).

Ahora regresa a sus raíces con una historia coescrita por él mismo que vuelve a poner a un grupo de personajes engañándose, insultándose y matándose en nombre del honor, perdón, del dinero, aunque esta vez todo su elenco es un envidiable desfile de estrellas.

Ahí está Matthew McConaughey como hilo conductor, un americano en Inglaterra que está tratando de vender su emporio de marihuana. Ahí está Charlie Hunnam como la voz de la razón, dando otra actuación olvidable. Ahí está Henry Golding, la reciente revelación que aquí solamente tiene que poner cara de malo. Y Michelle Dockery, la única mujer del elenco, tratando de hacer algo con un personaje de arquetipo.

Y de repente entra Colin Farrell, excéntrico y tratando de darle sentido a una historia que durante su primera mitad es tediosa y sin un dejo de coherencia. Eventualmente mejora, pero solo porque un florido Hugh Grant toma más protagonismo y quiere a toda costa robarse la película.

Y la anarquía que alguna vez tuvo Ritchie ahora es puro artificio. Nos tiene adivinando, pero al final no queda nada.

Título original: The Gentlemen
Año: 2020.
País: Reino Unido, Estados Unidos.
Director: Guy Ritchie.
Elenco: Matthew McConaughey, Charlie Hunnam, Hugh Grant, Henry Golding, Michelle Dockery, Colin Farrell.

Esta reseña apareció originalmente en los periódicos Mural y Reforma.