Reseña: La llamada del diablo

Es sabido que el público mexicano tiene una fascinación especial por el género de terror, y por eso casi cada semana hay nuevas películas en cartelera listas para asustar a los asistentes. Si la forma en que nuestra cultura trata el tema de la muerte y la religión tiene algo que ver con esto, eso es otra historia, pero esta vez toca el turno de ver La llamada del diablo.

Un grupo de amigos ha atormentado a Edith Cranston (Lin Shaye) por años, y cuando la mujer se suicida, los nombra a todos en su testamento, desafiándolos a hacer una llamada por separado que los enfrentará a sus miedos más oscuros.

El mayor atractivo de la modesta cinta es quizás la participación de Shaye, legendaria actriz de películas de terror –incluyendo la saga de La noche del demonio– y de Tobin Bell, mejor conocido como Jigsaw en la saga de Saw: Juego macabro.

Ambos veteranos se divierten de lo lindo atormentando a estos jóvenes en una película que no termina por decidir si quiere apoyarse en lo sobrenatural o en el gore, dejándonos simplemente con un rato entretenido sin mayores aspiraciones.

Título original: The Call
Año: 2022
País: Estados Unidos
Director: Timothy Woodward Jr.
Elenco: Tobin Bell, Lin Shaye, Erin Sanders
Guion: Patrick Stibbs

Esta reseña apareció inicialmente en la sección Primera Fila del periódico Reforma, el 28 de enero de 2022.

Pepe Ruiloba
pepe@cinepantalla.com

Apasionado del cine, la televisión y el olor a tierra mojada de Guadalajara. Crítico de cine y programador de festivales. Más Forrest que Pulp, pero para todos hay. Y pa fregonas... Salma.

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